Nos faltan gargantas por cuestiones sagradas: las vacaciones. Pero eso no quiere decir que nuestro grito que reclama la utopía sea menos intenso. De hecho, hoy no hay latitud ni coordenada a la que no lleguen las voces humanas que hoy se suman al coro habitual de la nave.
lunes, marzo 17, 2008
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1 comentario:
Desde enero, salgo de mi trabajo un hora antes y ¡por fin puedo escucharos!
Gracias por hacerme el camino a casa más agradable.
Aunque no comente mucho vuestro blog. Os sigo y leo puntualmente vuestras actualizaciones.
Siempre de vuelta a la Ciudad Invisible.
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