Hoy el navío se ve invadido por una plaga de ratones de biblioteca. Somos nosotros, que husmeamos por los rincones buscando en el papel, entre las líneas, la ruta a la quimera que andamos persiguiendo.
Comenzaremos hoy la singladura con una peligrosa inmersión en las profundidades del espacio tiempo, hasta el remoto núcleo de aquella Biblioteca de Babel cuya existencia desveló hace treinta años Jorge Luis Borges. Para celebrar este trigésimo aniversario la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales está desarrollando el Encuentro Internacional Borges-Babel. Para hablarnos del evento, y desentrañar en lo posible el camino secreto del laberinto borgiano, nos acompañará María Kodama, esposa y secretaria del escritor.
Si quieres ampliar tu información sobre su vida o su obra aquí tienes una biografía, e incluso le podrás escuchar recitar sus poemas, gracias a la magia de la red, y de la gente de El poder de la Palabra, claro. Un pierdecursos cultural.
Muchos opinan ahora que Internet es lo más parecido a esa biblioteca babélica que soñó el argentino, incluso algunos se empeñan en demostrar su posible construcción (pierdecursos arquitectónico). Otros, sin embargo, imaginan al hombre como único refugio de la Literatura.
Es el caso de una asociación de deslenguados individuos que van a poner en práctica el Proyecto Fahrenheit 451. No, no van a quemar libros (espero) sino a convertirse en hombres libro. Antonio Rodríguez, Marga Alvaro, Almudena Moreno y otras Personas-Libro nos hablarán del proyecto. Yo también soy una Persona Libro es el lema que les anima.
Por cierto que Borges, en el prólogo a la primera traducción al español de Crónicas Marcianas, en 1955, decía de Ray Bradbury: "¿Qué ha hecho este hombre de Illinois, me pregunto, al cerrar las páginas de su libro, para que episodios de la conquista de otro planeta me pueblen de terror y de soledad? ¿Cómo pueden tocarme estas fantasías, y de una manera tan íntima?".
Quizás se hubiese estremecido más si hubiese leído la Coda a Fahrenheit 451 que Bradbury escribió en 1979. En ella habla de todas las presiones y “sugerencias” a las que se vio sometido con motivos de sus libros. Un pierdecursos espeluznante y vigente a más no poder.
Y para acabar, un pierdecursos video-artístico. Fahrenheit, de Locking Shocking (Oscar Benito de Pablos y Ana González Rodríguez), uno de los trabajos que participan en el concurso Ingenio400. Cuidado con jugar con el fuego...
Comenzaremos hoy la singladura con una peligrosa inmersión en las profundidades del espacio tiempo, hasta el remoto núcleo de aquella Biblioteca de Babel cuya existencia desveló hace treinta años Jorge Luis Borges. Para celebrar este trigésimo aniversario la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales está desarrollando el Encuentro Internacional Borges-Babel. Para hablarnos del evento, y desentrañar en lo posible el camino secreto del laberinto borgiano, nos acompañará María Kodama, esposa y secretaria del escritor.
Si quieres ampliar tu información sobre su vida o su obra aquí tienes una biografía, e incluso le podrás escuchar recitar sus poemas, gracias a la magia de la red, y de la gente de El poder de la Palabra, claro. Un pierdecursos cultural.
Muchos opinan ahora que Internet es lo más parecido a esa biblioteca babélica que soñó el argentino, incluso algunos se empeñan en demostrar su posible construcción (pierdecursos arquitectónico). Otros, sin embargo, imaginan al hombre como único refugio de la Literatura.
Es el caso de una asociación de deslenguados individuos que van a poner en práctica el Proyecto Fahrenheit 451. No, no van a quemar libros (espero) sino a convertirse en hombres libro. Antonio Rodríguez, Marga Alvaro, Almudena Moreno y otras Personas-Libro nos hablarán del proyecto. Yo también soy una Persona Libro es el lema que les anima.
Por cierto que Borges, en el prólogo a la primera traducción al español de Crónicas Marcianas, en 1955, decía de Ray Bradbury: "¿Qué ha hecho este hombre de Illinois, me pregunto, al cerrar las páginas de su libro, para que episodios de la conquista de otro planeta me pueblen de terror y de soledad? ¿Cómo pueden tocarme estas fantasías, y de una manera tan íntima?".
Quizás se hubiese estremecido más si hubiese leído la Coda a Fahrenheit 451 que Bradbury escribió en 1979. En ella habla de todas las presiones y “sugerencias” a las que se vio sometido con motivos de sus libros. Un pierdecursos espeluznante y vigente a más no poder.
Y para acabar, un pierdecursos video-artístico. Fahrenheit, de Locking Shocking (Oscar Benito de Pablos y Ana González Rodríguez), uno de los trabajos que participan en el concurso Ingenio400. Cuidado con jugar con el fuego...
Hasta esta tarde en la Procelosa Mar de las Ondas Hertzianas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario